Estas son las conclusiones principales referidas a España que se extraen de la publicación de la OCDE “Health at a Glance: Europe 2016” –“Panorama de la salud: Europa 2016”– y que ya se intuían de la Encuesta de Competitividad Global del Foro Económico Mundial, que posicionaba a España como el tercer país del mundo con mayor esperanza de vida.
Tras mejoras estables en las últimas décadas, España cuenta con la mayor esperanza de vida de todos los países de la Unión Europea. La esperanza de vida al nacer es de 83,3 años, se encuentra más de dos años por encima de la media europea (80,9).
Vivimos más, pero ¿vivimos mejor?
La OCDE resalta que “la tendencia tan positiva y estable que ha experimentado España ha sido extraordinaria, pero al vivir durante más tiempo, las personas suelen vivir con una o más dolencias crónicas”. La OCDE revela que más de la mitad (55%) de los años de vida restantes de las personas de más de 65 años los viven con alguna discapacidad, aumentando la demanda de servicios de salud y de cuidados a largo plazo. El estudio pone el foco en los esfuerzos que son necesarios para reducir factores de riesgo para la salud, promover un envejecimiento más saludable y reducir las desigualdades sanitarias entre los diferentes grupos socio-económicos.
Progresos en la reducción del consumo de tabaco y alcohol
Aunque España ha conseguido reducir algunos factores de riesgo de forma significativa, como el consumo de tabaco y de alcohol, la OCDE afirma que todavía hay posibilidad de progresar y acercarse a los países que son líderes de la UE en muchas áreas. En 2014, el 23% de los españoles todavía fumaban a diario, lo cual muestra una reducción desde el 32% del año 2000, pero que aún así es superior a la media de la UE (21%) y es más del doble de la tasa actual en Suecia (12%). Como en cualquier otro país, hay más hombres fumadores que mujeres, pero la diferencia por género es menos significativa que en otros casos. La OCDE afirma que esto se explica por la mayor tasa de mujeres fumadoras, que está por encima de la media europea. Un aspecto positivo es que las tasas de consumo de tabaco en jóvenes de ambos sexos de 15 años de edad son de las más bajas de toda la UE en el curso de 2013/14.
Sobrepeso y obesidad: problemas tanto en la adolescencia como en la edad adulta, sobretodo en la población con un nivel educativo más bajo
El informe de la OCDE afirma que, como en otros países, los problemas de sobrepeso y obesidad son de gran relevancia para la sanidad pública española. Más de uno de cada seis adultos españoles padece obesidad (16.7% en 2014), comparado con uno de cada ocho en 2000 (12.6%). Según la última versión de Comportamientos de Salud en la Población Escolar, el 20% de los jóvenes de 15 años tenían sobrepeso en el curso 2013/14, la mayor tasa después de Malta y Grecia. Los problemas de sobrepeso en la infancia y la adolescencia aumentan el riesgo de padecer obesidad en la edad adulta.
Hay mucha diferencia en las tasas de obesidad en función de factores sociales, como en otros países, explica la OCDE. La tasa de obesidad en adultos de España es más de dos veces mayor para la población con nivel educativo bajo que para los más educados (23% comparado con 10%, en 2014).
Aumentar la cobertura de vacunación contra la gripe en las personas mayores
El porcentaje de la población mayor de 65 años que están vacunados contra la gripe es mayor que la media de la UE, pero se ha reducido de forma significativa en la última década, como en otros países europeos, afirma el estudio. Aunque el 70% de personas mayores de 65 años se vacunaron contra la gripe en 2004, la proporción cayó al 56% en 2014. La OCDE explica que este descenso ha impedido a España alcanzar el objetivo del 75% de cobertura recomendado por la OMS y el Consejo Europeo en 2009. Una baja cobertura de vacunación aumenta el riesgo de contraer gripe y en consecuencia, el riesgo de complicaciones que llevan a más hospitalizaciones e incluso a muertes.
