El miembro del Foro de Expertos del Instituto Santalucía y socio fundador de LoRIS analiza en este podcast el impacto de la Covid-19 sobre el sistema de Previsión Social Complementaria.
En un contexto de creciente longevidad, “tenemos que ser conscientes que las pensiones públicas están sometidas a un estrés constante y no lo pueden hacer todo”, afirma José Antonio Herce, miembro del Foro de Expertos del Instituto Santalucía y socio fundador de LoRIS en este podcast.
Herce considera que a cambio de disfrutar de la tranquilidad cuando estemos disfrutando del retiro laboral, es necesario “incrementar nuestro esfuerzo previsional durante nuestra vida laboral”. En su opinión, no solo con ahorro complementario a la pensión pública, sino también con un empleo más productivo en los años de vida extra que estamos ganando cada década, es decir, “prolongando la vida activa y retrasando la edad jubilación”.
Considera que hay que “reinventar” el sistema de Previsión Social Complementaria e importar medidas que se han puesto en marcha con éxito en otros países, como es la adscripción por defecto a planes de empleo (planes de pensiones que las empresas ofrecen a sus empleados) e individuales para autónomos, y desde que se comienza la vida laboral. Esta cuasi obligatoriedad (el trabajador puede darse de baja con posterioridad) deja unos datos llamativos. Más de la mitad del ahorro de los británicos está concentrado en planes de pensiones, frente al 15% de los españoles, según datos de Eurostat.
“La reinvención tiene que lograr que la participación sea masiva entre asalariados y autónomos”, comenta, más aún cuando la frontera entre unos y otros se “desdibuja” con la llamada gig economy, la economía de los recados referida a aquellos que trabajan en el reparto a domicilio de paquetes o comida a domicilio para plataformas como Amazon o Glovo y cuya protección social “deja mucho que desear”, puntualiza Herce.
José A. Herce sobre el Ahorro Previsional para la Jubilación
El experto afirma que “la responsabilidad tiene que ser compartida”, de tal manera que empresa y trabajadores aporten por igual a los planes de empleo. Además, resulta un incentivo que el Estado apoye con medidas fiscales la participación de unos y otros. En el caso de los autónomos, Herce propone bonificaciones adicionales por las aportaciones.
Este colectivo tiene unas pensiones un 40% inferiores que la de los asalariados ya que la mayoría de los trabajadores por cuenta propia elige cotizar por la base mínima, lo que significa que a menor cotización a la Seguridad Social, menor es la prestación que reciban en el futuro para su jubilación. Por esta razón, Herce considera que deben hacer un “compromiso” mayor.
Ante los efectos de la Covid-19 en nuestro Estado de Bienestar, nuestro Foro de Expertos viene compartiendo conocimiento y opiniones en Tiempo de Reflexión sobre cómo mejorar nuestras vidas. Ignacio Conde-Ruiz, subdirector de Fedea, ha aportado su visión de cómo debería implementarse el Ingreso Mínimo Vital (IMV) que recientemente ha aprobado el Gobierno. En su opinión debería implementarse una prestación temporal para atender las necesidades urgentes provocadas por la pandemia en familias en pobreza extrema, que sirviera de base para abordar otra ayuda de carácter permanente.
Por su parte, la doctora en Ciencias Económicas y Empresariales, Inmaculada Domínguez Fabián, ha analizado el impacto de la COVID-19 sobre la Seguridad Social y pone de relieve la labor protectora de este mecanismo sobre la sociedad. Algo que solo podrá mantenerse si no se tensiona el sistema.
