¿Qué efecto tendrá la Jubilación Activa Ampliada?
Celia Ferrero (vicepresidenta de la ATA): “El efecto de la Jubilación Activa Ampliada va a ser muy positivo. Tenemos que mantener activas a muchas personas, y yo creo que eso es bueno para el sistema, e incluso para la propia persona. Hay muchas personas que se sienten todavía en edad de trabajar a los 65 y es una buena forma, no solamente para el sistema, sino para ellos mismos, para que tengan una vida mejor, se sientan más realizados y que no tengan esa dicotomía de “yo estoy jubilado, pero quiero seguir trabajando”. Además, es una buena forma de luchar contra la economía sumergida que se da de forma muy involuntaria (porque si pudiesen declararlo, yo creo que lo harían), pero muchas veces el coste es mayor que el hecho de no declararlo. Estos esquemas van a ser buenos para acabar con la economía sumergida y dar mayor sostenibilidad al sistema.”
¿Qué retos afrontan los autónomos de cara a su jubilación?
CF: “Uno de los grandes problemas es la planificación, es decir, el problema del autónomo es que tiene ingresos inciertos y las contribuciones a la Seguridad Social sí son ciertas. Todos los meses, en función de qué tipo de autónomo es –si es societario o si es persona física–, se tiene unas bases sobre las que elegir. Normalmente siempre se elige la mínima precisamente por el miedo a no saber lo que va a pasar mañana, es decir, viven con esa incertidumbre de ingresos. Su contribución suele ser la mínima porque no quieren arriesgarse a no poder pagarla. Ese es uno de los grandes retos: hay que hacer muchísima pedagogía. Es cierto que hay muchos autónomos que están por debajo del salario mínimo interprofesional, incluso de la base mínima, y para eso lo que hay que intentar es que vayan al sistema, es decir, buscar tarifas hiper-reducidas. Pero también es cierto que hay muchos autónomos que sí que tendrían posibilidades de cotizar más y no lo hacen. ¿Por qué? Porque, primero, entienden que eso es un impuesto y no un seguro, por eso es muy importante que se haga muchísima pedagogía. Luego también tendríamos que jugar con este tema de la incertidumbre de ingresos para decir “bueno, yo voy a hacer mi contribución mensual, pero en un momento determinado del año tengo un dinero que me apetece aportar y puedo aportar al sistema”, de tal forma que yo voy a cotizar por lo mismo, pero en realidad estaré cotizando por una base más alta: pago lo mismo, pero cotizo por una base más alta, haciendo una aportación voluntaria. Así evolucionaríamos un poquito a ese sistema mixto entre capitalización y reparto, que yo creo que es esencial. Es muy difícil, si no es capaz de planificar sus ingresos, planificar su protección. Hay que ayudar a los trabajadores autónomos en todo lo posible, darles las mayores fórmulas posibles y, sobre todo, intentar que estén siempre en el sistema y que sean conscientes de que la Seguridad Social nunca da más de lo que se ha aportado, es decir, recibes lo que cotizas. Y desgraciadamente, hoy en día, los autónomos cotizan 40% menos que los asalariados y, por tanto, perciben un 40% menos. Deben saber que tienen esa flexibilidad para poder acceder a mejores prestaciones.”
