José Enrique Devesa Carpio –Doctor de la Universidad de Valencia del departamento de Economía Financiera y Actuarial– es uno de los autores del primer estudio sobre la implantación de un sistema de cuentas nocionales en España. Aprovechando la presentación de estudio, hemos querido plantearle algunas cuestiones muy específicas sobre este sistema de pensiones, en especial sobre su funcionamiento e implantación.
Sobre su funcionamiento, Devesa Carpio señala que “los sistemas de cuentas individuales o nocionales contabilizan todas las cotizaciones que se han realizado desde la entrada en el mercado de trabajo de un individuo hasta que se jubila. Se van acumulando junto con los rendimientos nocionales o ficticios, según el tipo nocional o tipo de interés que se utiliza para capitalizarlo. Una vez llegada la edad de jubilación, se transforma en la pensión inicial a través de un factor de conversión que tiene algún componente actuarial, como puede ser la esperanza de vida, o el valor actual de una renta vitalicia”.
Inquirido sobre la conveniencia o no de este modelo público de pensiones para España, el Doctor de la Universidad de Valencia no duda en afirmar que “en España sería conveniente que se implantara un sistema de cuentas nocionales, porque es un sistema donde hay una mayor relación entre las aportaciones que realizan los cotizantes y las prestaciones que van a recibir en el momento de la jubilación. Este sistema es mucho más transparente, mucho más claro, y hay una mayor equidad actuarial e intergeneracional”.
Seguimiento en el blog
En el blog del Instituto santalucía estamos haciendo un seguimiento pormenorizado de las características de este sistema de pensiones, basado en el sistema financiero de reparto y de aportación definida. Aunque tiene bastantes similitudes con el actual sistema español, en cuanto que es de reparto, la diferencia fundamental estriba en que el actual es de prestación definida. Se trata de un sistema de reparto, donde las cotizaciones realizadas cada año por los cotizantes van destinadas al pago de las pensiones de los pensionistas de ese mismo periodo. Los cotizantes, por tanto, no tienen sus aportaciones en un fondo propio, por lo que este sistema nunca puede considerarse como un sistema de capitalización. De igual manera, la cuenta de cada cotizante es virtual, no es real, ya que las cotizaciones no son depositadas realmente en una cuenta ni se invierten en el mercado financiero ni, por tanto, se benefician de la rentabilidad que pudiera obtenerse de su inversión; de ahí el nombre de cuenta nocional o virtual o teórica.