La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ha publicado la guía Psicología para inversores en la que describe técnicas y recomendaciones para mitigar los sesgos cognitivos y racionalizar los procesos de inversión.
Su objetivo es difundir una serie de recomendaciones destinadas a inversores basadas en los hallazgos de la economía conductual. Esta disciplina explica el funcionamiento de los mercados y el comportamiento de los inversores incorporando conocimientos de otras disciplinas como la sociología, la antropología y la psicología. La materia ha cobrado especial relevancia con ocasión de la reciente concesión del Premio Nobel de Economía al economista Richard H. Thaler.
La guía recoge una serie de propuestas dirigidas a inversores que, según la CNMV, facilitan la aplicación práctica de las principales premisas de la economía conductual a la adopción de decisiones de inversión. Recoge una introducción relativa a los fundamentos básicos de la economía conductual y al proceso de toma de decisiones de inversión. A continuación, describe detalladamente los sesgos cognitivos que afectan a las distintas fases de este proceso. Además, hace referencia a una serie de técnicas y recomendaciones destinadas a mitigar dichos sesgos cognitivos y a facilitar al inversor la racionalización de su proceso de inversión. Para finalizar, y a modo de resumen, la facilita una serie de recomendaciones generales.
Qué es la economía conductual o behavioral economics
La teoría económica tradicional se ha ocupado desde sus orígenes de la manera en que los sujetos adoptan sus decisiones de inversión, ahorro y gasto. Para ello se ha basado en las premisas de que los sujetos saben lo que quieren, utilizan la información disponible de una manera dirigida a conseguir sus objetivos y comprenden perfectamente los riesgos y beneficios de sus decisiones financieras. Sin embargo, los numerosos descubrimientos sobre el modo en que funciona el cerebro humano realizados en los últimos años y procedentes de disciplinas como la psicología, la neurología o la neurofisiología revelan que esto no es así y que las personas con frecuencia desconocen sus preferencias, utilizan incorrectamente la información disponible y no comprenden bien los riesgos que asumen.
La economía conductual o psicología económica estudia los comportamientos humanos reales en un mundo real para desarrollar, a partir de ello, modelos económicos más precisos y prácticos que los facilitados por la teoría económica convencional.
En consecuencia, la economía conductual tiene en cuenta aquellos factores sutiles y no tan sutiles que subyacen a las decisiones financieras. Esta disciplina supone un intento de analizar las pautas y sesgos del comportamiento de las personas y, a partir de ellos, predecir modelos de comportamiento.
Las investigaciones realizadas en el ámbito de la economía conductual muestran que la mayoría de estas pautas o sesgos son predecibles. Estos hallazgos abren nuevas posibilidades de lograr una mejor comprensión del comportamiento de los inversores y, por tanto, pueden ayudar a optimizar la toma de decisiones financieras y de ahorro.