Los planes de empleo o planes de pensiones de empleo son el segundo pilar del sistema de pensiones y son planes que suministran las empresas a sus trabajadores.
Seguro que en alguna ocasión has oído hablar de los planes de empleo o planes de pensiones de empleo, pero no tienes muy claro qué son. Desde diferentes organizaciones se reclama el uso de este vehículo de inversión que forma parte del ahorro previsional a largo plazo. Es decir, como ahorro complementario a la pensión de jubilación. El ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones acaba de dar luz verde al proyecto de ley para impulsar este sistema de ahorro previsional. Te explicamos todo sobre este vehículo de ahorro previsional a largo plazo.
¿Qué son los planes de pensiones de empleo?
Los planes de empleo son planes de pensiones que proporcionan las empresas, bancos u otras organizaciones a sus trabajadores. Es el llamado segundo pilar del sistema de pensiones (el primero, son las pensiones públicas y el tercero, los planes individuales o privados).
Sin embargo, en nuestro país, no están muy extendidos entre el tejido empresarial. Solo grandes compañías y entidades financieras proporcionan planes de empleo a sus trabajadores. Para fomentarlos se requieren de estímulos fiscales. Es por ello que desde las autoridades políticas se han aprobado medidas para incentivar a las empresas que proporcionen este ahorro previsional para la jubilación.
Al mismo tiempo, se han introducido los planes de empleo simplificados para autónomos. Este colectivo de trabajadores puede optar tanto a esta modalidad promovida por entidades, asociaciones u otros colectivos como a los planes de pensiones individuales.
Cómo funcionan los planes de empleo o planes de pensiones de empleo
El sistema consiste en que un porcentaje de la nómina se ingresa en un plan de pensiones operado por una entidad gestora.
Hay países, como Holanda o Reino Unido donde por imperativo legal, toda organización debe proporcionar un plan de empleo a su plantilla a cambio recibe exenciones fiscales. La adscripción es automática. Para los británicos, es cuasiobligatoria y el porcentaje transita entre un 5% y 8% del sueldo. En cambio, los holandeses no pueden cancelar su suscripción y el porcentaje de salario destinado al plan se eleva al 20%. No es de extrañar que en ambos países, el ahorro financiero canalizado a través de planes de pensiones y seguros se sitúe en un 58% y 66%, respectivamente, según datos de Eurostat. En España el porcentaje se sitúa en el 16%.
Tratamiento fiscal de los planes de empleo
El tratamiento fiscal de los planes de empleo o planes de pensiones de empleo es el mismo que el de un plan de pensiones individual, de tal manera que el tratamiento fiscal no varía. Las aportaciones desgravan en la declaración de la renta hasta un máximo de 8.500 euros anuales, en el caso de los planes de empleo, y de 4.250 euros en el de los planes simplificados.
Los trabajadores, al margen de si trabajan por cuenta ajena como propia, pueden también contar un un plan de pensiones individual, cuya desgravación asciende a 1.500 euros.
Tipo de plan de pensiones | Límite de desgravación anual |
Plan de pensiones individual | 1.500 euros |
Plan de empleo (A) | 8.500 euros |
Plan de empleo simplificado (B) | 4.250 euros |
Total A | 10.000 euros |
Total B | 4.750 euros |
Una vez que se produce el rescate del plan, éste ha de computarse en el IRPF como renta del trabajo, de tal manera que se tributa en función del total de los ingresos.
Los tres pilares del sistema de pensiones
Como mencionábamos anteriormente, el sistema de pensiones está formado por tres pilares.
- Primer pilar: cobertura a través del Estado.
- Segundo pilar: previsión social empresarial o los citados planes de empleo o planes de pensiones de empleo. Y, como novedad de 2022, los planes de empleo simplificados para autónomos.
- Tercer pilar: previsión individual o planes de pensiones individuales.
Dado el cambio demográfico que se está produciendo, con una población cada vez más longeva y con una baja tasa de natalidad (las generaciones trabajadoras son las que financian las pensiones a través de sus cotizaciones sociales), el actual sistema de pensiones se encuentra bajo una enorme presión y los expertos apremian a los ciudadanos a aumentar el ahorro particular para complementar la pensión pública durante su etapa de jubilación.
En la actualidad, la ratio de cotizantes por pensionista se sitúa en 2,3 según el INE, lejos de los 2,7 que había en 2008, y la tendencia es a la baja.
Ante este escenario, estudios no prevén que el nivel de la tasa de sustitución o reemplazo (porcentaje de ingresos entre la última nómina y la pensión y que refleja la pérdida de poder adquisitivo ) pueda sostenerse en el tiempo. En nuestro país esa tasa está situada en el 72%, es decir, se pierde poco poder adquisitivo. La media de la Unión Europea es del 46,3%. Para 2045, cuando la generación del babyboom esté en plena jubilación, se reducirá al 51,3%, según un informe de la Comisión Europea (The 2018 Ageint Report).
Desde el Instituto Santalucía contribuimos a fomentar la educación financiera de los ciudadanos para que cuenten con conocimientos y herramientas que les ayuden a ahorrar e invertir en su futuro y puedan disfrutar de su etapa como jubilados. Puedes utilizar nuestro simulador de jubilación para comprobar cuál será tu prestación cuando te jubiles.