Debatimos sobre el impacto que tiene la educación financiera en los jóvenes y la importancia de incluirla como asignatura obligatoria en secundaria y bachillerato en un encuentro virtual. ‘Educación financiera, un pilar para el futuro’ fue organizado por el Instituto Santalucía con motivo de la celebración de la semana de la Educación Financiera, y participaron el colectivo de profesores CEAPES (Confederación Española de Asociaciones de Profesores de Economía) y una estudiante de Economía, Clara Soriano.
Compartimos un resumen del encuentro que puedes ver completo en nuestro canal de YouTube.
Estado de la educación financiera en los centros educativos
La educación financiera en España sigue siendo una asignatura pendiente, pese a los avances que se han hecho en los últimos años. Empezando por datos contrastables, como el último informe PISA 2022 de la OCDE en el que nuestro país registra datos “mediocres”, tal y como los calificó, Antonio Rey, profesor de Economía, añadiendo que “hay países con un presupuesto educativo mucho menor que el nuestro. Estar ahí no es un buen resultado”.
En esta nueva edición, los jóvenes españoles empeoraron los respecto a la edición anterior y se situó 12 puntos por debajo de la media de la OCDE, alcanzando 486 puntos.
Por parte del Gobierno, se traslada a las Comunidades Autónomas la impartición de estos conocimientos, siendo ellas las encargadas de marcar cómo y cuánto se enseña sobre esta asignatura y si se hace de forma transversal, a partir de otras asignaturas como Matemáticas, tal y como apuntó en nuestro documental “Y a mí qué el dinero” (2021) María Dolores López Sanz, entonces directora general de la Dirección General de Evaluación y Cooperación Territorial del Ministerio de educación y Formación Profesional.
“Estamos viendo cómo en algunas regiones hay hasta nueve asignaturas de educación financiera y en otras no hay nada. Algo que incrementa las desigualdades”, denunció Juan Pablo Riquelme, vicepresidente Adesmur (Asociación de Docentes de Economía en Secundaria de la Región de Murcia).
Una situación que viene dada por “la aparente aversión que hay hacia los temas económicos”, sostuvo el profesor de economía. “Parece que enseñar temas sobre dinero va a pervertir el espíritu humanístico, pero todo el mundo reconoce que saber manejar el dinero es sumamente útil”.
Materia de éxito entre el alumnado
A nivel práctico, “estas asignaturas están teniendo éxito entre el alumnado”, anunció el vicepresidente de Adesmur. “Los estudiantes dicen que es muy útil para entender conceptos necesarios y prácticos a la hora de pedir un préstamo o de tomar decisiones consensuadas y concienzudas”.
“A los alumnos les resulta muy útil cuando les explicamos cómo se compone una nómina, porque muchos de ellos trabajan en verano y les interesa. Les gusta saber de dónde viene el dinero, cómo se estructura, cómo se cotiza…”, señaló Ramón Castro, profesor de Economía y director del Instituto Fernando de Mena en Socuéllamos (Ciudad Real) y participante en el citado documental.
De hecho, Clara Soriano, estudiante de Economía y Derecho, también presente en el documental como alumna por aquel entonces de Castro, agradeció profundamente el haber contado con estos conocimientos. “Haber recibido esta educación financiera ha sido un factor clave en mi vida adulta, más allá de saber conceptos más básicos. Me ha permitido adquirir una base sólida para tomar decisiones económicas de manera más formada. Me ha brindado mucha confianza y tranquilidad”. Tanto así que, Clara aseguró que ella y sus compañeros se llevaban este aprendizaje a su casa para comentarlo con sus padres.
“Nosotros les enseñamos cosas básicas que pueden aplicar en el día a día. Desde elaborar una lista de la compra con presupuesto, hasta saber leer un extracto bancario. Las familias se han tomado este aprendizaje con entusiasmo”, agregó Ramón Castro.
Por todo ello, la ahora estudiante de grado se mostró favorable de reformar el sistema educativo “porque no se nos está sacando todo el potencial que tenemos. No se nos exprime en las aulas”, añadió para invitar a elaborar un programa que haga que los jóvenes salgan al mundo con unas bases más sólidas para tomar decisiones económicas de manera más formada.
Base de conocimiento para combatir fraudes
Un aspecto clave sobre la necesidad de apostar por la formación en educación financiera lo dio Antonio Rey, cuando explicó que los “adolescentes están muy influidos por ciertos personajes que aparecen en redes sociales y que enseñan cosas que pueden ser calificadas como anti-educación financiera”.
Una idea respaldad por Juan Pablo Riquelme, ya que apuntó que el segundo público objetivo por parte de los estafadores es, precisamente, el colectivo joven. “Parece más predispuesto a caer en engaños relacionados con apuestas, chiringuitos financieros y otro tipo de cosas”. Un motivo por el cual parece todavía más importante, a ojos de los dos expertos, hacer una puesta a nivel nacional para mejorar la educación financiera.
Para avanzar en los planes educativos y seguir extendiendo la educación financiera por el territorio y por todos los itinerarios académicos, Castro aseguró que, en primer lugar, “es necesario establecer un punto de encuentro entre todos los actores y agentes que conformamos el sistema educativo”. Y es que, el director del Instituto Fernando de Mena lamentó el “grave desencuentro” que se vive en la actualidad.