La II Conferencia Internacional sobre “Longevidad extrema y Soluciones para la Jubilación”, organizada por AFI y patrocinada por el Instituto Santalucía, reunió a un grupo de expertos internacionales para debatir sobre materias que cada vez preocupan más a los ciudadanos. Los investigadores han resaltado que las terapias actualmente en desarrollo nos darán 30 años extra de vida y permitirán comprar tiempo para hacer posible alcanzar la “velocidad de escape de la longevidad’’. Este concepto se refiere al desarrollo y aplicación generalizada de terapias que permitan neutralizar los factores que causan el envejecimiento.
David F. Babbel, Catedrático Emérito de la Wharton School de la Universidad de Pennsylvania y Senior Advisor de Charles River Associates (Boston) explicó cómo, en los EE UU, un número creciente de compañías aseguradoras están integrando los seguros de vida con los de rentas vitalicias. Ello es así gracias a la cobertura simultánea que esta combinación ofrece frente al riesgo de mortalidad, por una parte, y el de longevidad, por otra, añadiendo que, de esta forma, se puede ofrecer una solución financiera razonable frente al avance de la longevidad.
En el conjunto de intervenciones quedó patente que nos encontramos ante un reto social de primera magnitud. Por una parte, está muy claro que la ciencia está haciendo progresos indudables en este sentido, mientras que, por otra, los esquemas y productos para una jubilación sostenible no acaban de adaptarse a este nuevo escenario.