En los últimos años, se ha aprobado diferentes reformas que han modificado la fiscalidad de los planes de pensiones, reduciendo de forma considerable el importe máximo a desgravar en la declaración de la renta desde los 8.000 euros anuales que había hasta 2020 a los 1.500 euros a partir de 2022.
Tratamiento fiscal de los planes de pensiones en las aportaciones
Los planes de pensiones cuentan con un tratamiento fiscal favorable mientras se realizan las aportaciones, pues desgravan en la declaración de la renta. Si bien, en realidad, lo que se produce es un diferimiento del pago de impuestos al momento del rescate, tributando como una ingresos más del trabajo en el IRPF.
Fiscalidad hasta 2020
Hasta entonces, todas las aportaciones que se realizaban en un plan de pensiones individual o de empleo desgravaban en la declaración de la renta hasta un límite de 8.000 euros o hasta el 30% de los ingresos.
En el caso de los individuales, se podían incluir otros 2.500 euros de las aportaciones al plan del cónyuge, siempre y cuando este no obtuviera ingresos. El límite para las personas sin discapacidad era de 24.500 euros.
Fiscalidad en 2021
En 2021, la desgravación se redujo hasta los 2.000 euros, según lo establecido en los Presupuestos Generales del Estado de aquel año. En relación a la aportación al plan del cónyuge, bajó de los 2.500 a 1.000 euros. No se tocaron las aportaciones de las personas con discapacidad.
Otro cambio importante de la fiscalidad de los planes de pensiones en 2021 es que se fomentaban los planes de empleo, que son planes de pensiones ofrecidos en empresas y organizaciones a sus trabajadores, y para este vehículo la reducción fiscal aumentó hasta los 8.000.
En la actualidad, tan solo un 13% de los trabajadores cuenta con un plan de empleo, según la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco). Esto demuestra que son pocas las empresas que ofrecen este vehículo de ahorro.
En otros países, como Reino Unido u Holanda, hay un sistema cuasiobligatorio. Por un lado, a cambio de ventajas fiscales las compañías están obligadas a proporcionar este instrumento de ahorro a su plantilla y esta queda adscrita al plan de empleo de forma automática. Puede cancelar su adscripción, pero lo cierto es que casi no hay bajas. No es de extrañar, por tanto, que, por ejemplo, en Reino Unido, el ahorro financiero de los hogares en planes de pensiones esté por encima del 50% cuando en España es del 16%, según Eurostat.
Fiscalidad a partir de 2022
A partir de 2022 se volvió a reducir el límite de las aportaciones hasta los 1.500 euros.
Fiscalidad a partir de 2023
Ese año se puso en marcha un nuevo tipo de plan de pensiones, el plan simplificado dirigido a los autónomos, cuya desgravación es de 4.250 euros anuales.
Son compatibles algunas modalidades. Así, una persona puede tener dos planes de pensiones, uno individual y otro de empleo, ya sea como asalariado o como autónomo. Las desgravaciones quedan así:
Tipo de plan de pensiones | Límite de desgravación anual |
(A) Plan de pensiones individual | 1.500 euros |
(B) Plan de empleo | 8.500 euros |
(C) Plan de empleo simplificado | 4.250 euros |
Total A+B | 10.000 euros |
Total A+C | 4.750 euros |
Tratamiento fiscal de lo planes de pensiones en el rescate
Es en el momento del rescate del plan de pensiones cuando hay que tributar por el ahorro invertido y se tributa por lo que se llaman derechos consolidados (inversión y rentabilidad conseguida).
Los planes de pensiones se imputan en la declaración de la renta como un rendimiento más del trabajo, por lo que, en función del importe rescatado, puede penalizar más o menos en el IRPF en función de si se rescate de golpe o por rentas periódicas, lo que suaviza el impacto fiscal.
Tramos del IRPF
Base imponible | Tipo a aplicar |
Hasta 12.450 euros | 19% |
De 12.450 euros a 20.200 euros | 24% |
De 20.200 euros a 35.200 euros | 30% |
De 35.200 euros a 60.000 euros | 37% |
De 60.000 euros a 300.000 euros | 45% |
A partir de 300.000 euros | 47% |
Formas de rescate del plan de pensiones
Existen tres formas para rescatar el plan de pensiones:
- Forma de capital: rescatar todo lo aportado de una vez. Esta opción puede suponer pagar más de la mitad en impuestos.
- Forma de renta: pago periódico (mensual, trimestral, semestral o anual), como si fuera un sueldo mensual.
- Forma mixta: combinan las dos anteriores.
Es importante hacer números para que en el momento del rescate la base imponible no supere el tipo marginal y nos penalice en exceso. Por eso, una de las cosas a tener en cuenta es que, en el año de jubilación, si se han trabajado seis meses, puede que sea preferible esperar al siguiente ejercicio para rescatar el plan. Utiliza nuestra calculadora de rescate del plan de pensiones para conocer el impacto fiscal del reembolso.
Puedes obtener más información sobre la fiscalidad de los planes de pensiones y otros productos de ahorro en la guía actualizada “Manual práctico de fiscalidad de productos de previsión individual”.