Fuente: Fotonoticias del Congreso de los Diputados.
Los autónomos son los españoles que están más desprotegidos por el sistema público de pensiones. Al menos eso piensan los españoles según una encuesta publicada por el Instituto Santalucía y que ayer recogíamos en nuestro blog. En esta encuesta se analiza la percepción acerca del grado de protección pública que tienen los distintos colectivos. Hasta un 88,6% de los encuestados considera que los autónomos están desprotegidos por el sistema público de cara a su jubilación, cifra es ligeramente superior a la obtenida por el colectivo de personas al cuidado de los hijos o de las labores domésticas (88,4%), al de los parados de larga duración (85,3%) y al de los jóvenes entre 20 y 35 años, (83,9%).
La publicación por parte del Instituto Santalucía de esta encuesta y de una guía para la planificación financiera para la jubilación especialmente dirigidas a autónomos, ha coincidido en el tiempo con la presencia de las dos organizaciones más representativas del colectivo de trabajadores autónomos en la Comisión de seguimiento del Pacto de Toledo, en el que las fuerzas con representación parlamentaria han asistido a las reclamaciones que este colectivo, compuesto por más de 3.000.000 de personas, realiza para que el sistema público de pensiones sea viable y sostenible.
Más ingresos para RETA
La Federación de Trabajadores Autónomos (ATA) ha propuesto un paquete de medidas que estima que podrían incrementar en 7.200 millones de euros los ingresos del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). Así mismo, han rechazado la adecuación de la cotización de los autónomos a los ingresos reales, ya que a su juicio un autónomo nunca sabe lo que va a ingresar, al tiempo que han reconocido el déficit del RETA. Entre las medidas propuestas por esta organización, señalamos las siguientes:
- Quitar el tope de la base máxima de cotización a partir de los 47 años y mejorar la compatibilidad entre percibir una pensión de jubilación con el desarrollo de una actividad por cuenta propia.
- Bajar a 25 años el límite de 35 años cotizados exigidos.
- Elevar un 10% en cinco años las bases medias de cotización de los autónomos. Plantean un acuerdo para transformar las reducciones de cotizaciones en bonificaciones y que se paguen a través de impuestos.
- Articular un sistema que permita cotizar por una cuota similar a la tarifa plana a aquellos autónomos cuyos ingresos reales no superen el Salario Mínimo Interprofesional.
- Pasar a los miembros de administración de sociedades con control de la sociedad a un régimen asimilado dentro del RETA, sin cotizar por el Fogasa y el desempleo. Defienden que de esta manera mejora su cotización, siendo la cuota a la Seguridad Social, su retención correspondiente y su salario asumidos como gasto por la sociedad que administra.
Cotizaciones progresivas en función de los ingresos
La Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) afirmó que el sistema de cotización tendría que ajustarse para que aquel que más tiene, pague más y que el RETA no responde a los principios básicos de contribución, universalidad y solidaridad, ya que va en contra de los más débiles. Indicaron que de los 3,2 millones de autónomos, 2,14 lo hacen en la base mínima aportando 272 euros; 722.424 cotizan por encima de la base mínima de cotización con unos 400 euros; y el resto, casi 350.000, lo hacen en bases superiores. Proponen una modificación estructural del modo de cotización de los autónomos, ya que califican el sistema de “injusto”. En este sentido, realizaron algunas propuestas:
- Cotizaciones progresivas en función de los ingresos reales.
- Proponen que los autónomos que tengan unos ingresos netos anuales de menos de 9.000 euros (SMI) no tengan que cotizar.
- Incrementar la base mínima de cotizaciones a los autónomos con ingresos superiores a los 60.000 euros anuales, para aumentar la recaudación en 1.400 millones de euros.