Pensiómetro del segundo trimestre de 2022

9'

En la VIII edición del barómetro de las pensiones de Instituto Santalucía se han actualizado los 20 indicadores del sistema público español respecto a la edición anterior. Ofrecemos un análisis evolutivo de algunos de ellos mismos.

Inversa tasa de dependencia

El entorno de envejecimiento demográfico en el que actúa el sistema de pensiones español se refleja en un valor decreciente de la inversa de la tasa de dependencia demográfica de la población mayor (65 o más años). El deterioro es lento pero continuo, pasando de 3,62 personas entre 20 y 64 años (población en edad de trabajar) por cada persona de 65 y más años en enero de 2012 a 3,02 en enero de 2022. El ritmo de descenso es, por tanto, de 0,06 puntos por año.

Tasa de cobertura

Uno de los instrumentos de la reforma de 2011, para compensar esa tendencia demográfica al envejecimiento fue incrementar la edad legal de jubilación de forma progresiva hasta los 67 años, excepto para quienes hubieran cotizado un mínimo de 38 años y medio. El valor de los siguientes dos indicadores señala que este objetivo se ha conseguido, aunque sólo parcialmente. La tasa de cobertura de quienes perciben pensión sobre la población mayor de 65 años ha bajado ligeramente (del 75,7% al 74,9%, sin cambios en el último año).

Edad efectiva de jubilación

Por su parte, la edad efectiva de jubilación ha aumentado alrededor de 7 meses desde 2012 (0,59 años), la mitad de los 14 meses que se ha incrementado la edad legal. Hay que destacar, sin embargo, que en lo que llevamos de 2022 el aumento de la edad efectiva se ha acelerado de forma importante, pasando de 64,55 años en diciembre de 2021 a 64,77 en junio de 2022 (más de 2,5 meses), tendencia que habrá que ver si se confirma en los próximos trimestres.

Indicador de solidaridad

El indicador de solidaridad continúa su tendencia decreciente situándose en el 4,6% el peso de los complementos a mínimo en la nómina de pensiones, y ello pese a que en 2022 las pensiones mínimas han subido un 3% frente al 2,5% del resto de pensiones. Por tanto, cada vez se necesitan menos recursos para garantizar la pensión mínima al ser mayores los derechos generados por el cálculo inicial de la pensión. Esta evolución se percibe a medio plazo cuando se compara con el 7,2% de 2012.

Indicadores de sostenibilidad

Los indicadores de sostenibilidad que incorporan datos sobre la afiliación (tasa de afiliación y afiliados por pensionista) están influidos por la coyuntura económica. La tasa de afiliación muestra una mejora importante a medio plazo (del 57,7% de 2012, en el punto más bajo del ciclo, al 68,2% en 2022), reflejo de la recuperación económica tras la pasada crisis financiera. La mejoría en el último año también ha sido importante (65,3% en 2021), superando incluso el dato anterior a la pandemia (66,3% en enero 2020). El número de afiliados por pensionista en junio de 2022 ha experimentado un repunte importante respecto al año anterior (2,26 frente a 2,18) debido a un crecimiento mayor del número de afiliados que de pensionistas, continuando con la recuperación económica tras la Covid-19. El indicador de sostenibilidad más libre del ciclo económico y, por tanto, más comparable a lo largo del tiempo es el importe de la pensión media por euro cotizado de media en el sistema. Este indicador, salvo en 2020 y 2021 debido a los ERTEs y la exoneración de cotizaciones, muestra una tendencia a largo plazo a aumentar (1,98 en 2012, 2,26 en 2021 y 2,23 en 2022), lo que implica que la pensión media aumenta más que la cotización media. Este resultado no se debe al envejecimiento ni al ciclo económico sino que pone de relieve la insuficiente relación entre pensión y evolución de la economía española, y la necesidad de modificar el diseño de nuestro sistema de pensiones para que la cotización media crezca como mínimo igual y, si es posible, más que la pensión media (mayor productividad trasladada a salarios) y poder compensar la probable disminución a largo plazo del número de afiliados por pensionista por motivos demográficos.

Generosidad

La generosidad en términos absolutos, medida a través de la pensión media por pensionista, y el reemplazo de ingresos salariales, una especie de generosidad en términos relativos, son variables que han experimentado una mejora continua en el tiempo. La pensión media por pensionista incluidas todas las clases de pensión (jubilación, incapacidad permanente, viudedad, orfandad y favor familiares), se sitúa en junio de 2022 en 1.202,97, casi un 32% superior a la de junio de 2012, mientras que el IPC ha aumentado tan solo un 19% en este periodo. Esto se debe, sobre todo, al efecto sustitución (nuevas pensiones más altas que las que causan baja) y, en menor medida, a la ganancia de poder adquisitivo de algunas de las pensiones existentes (sobre todo las mínimas y las de viudedad).

Tasa de reemplazo agregada

La ganancia en relación con el salario en las pensiones de jubilación (tasa de reemplazo agregada) ha sido de más de 6 puntos al pasar del 58,3% en 2012 al 64,6% en 2020. No obstante, es destacable la pérdida de 0,7 puntos en este indicador en 2020 respecto a 2019 debido a que el salario medio aumentó de forma algo artificial, al afectar la crisis de la Covid-19 más a empleos con baja retribución.

Tasa de reemplazo marginal

En términos marginales, es decir, si comparamos la pensión media de la primera generación de jubilados (edades 65-69) con el salario medio de la última generación de activos (edades 60-64), o tasa de reemplazo marginal, se detecta una estabilización a medio plazo, pasando del 68,3% en 2012 al 68,2% en 2019, con una bajada al 67,6% en 2020 que se debe, en parte, al aumento del salario medio antes comentado, pero también al menor aumento de la pensión media de este tramo de edad, lo que demuestra cierto efecto de la reforma de pensiones de 2011 en cuanto a que ha contenido el crecimiento de la cuantía de las nuevas pensiones de jubilación (mayor número de años de cómputo de la base reguladora y aumento del número de años cotizados para que la pensión alcance el 100% de la base reguladora). En este sentido, entre 2012 y 2021, con la reforma de 2011 en vigor, la pensión media de las nuevas jubilaciones ha crecido menos (1,16% interanual) que el IPC entre 2010 y 2019 (1,36% interanual), algo que no ocurría anteriormente.

Brecha de género

En cuanto a la brecha de género, los indicadores recogen una tendencia de reducción a largo plazo. A nivel agregado, la pensión media de jubilación de mujeres se sitúa en un 67,6% de la de hombres (59,8% hace 10 años). La reducción de la brecha de género agregada continuará en el futuro ya que, en términos marginales, es decir, si se analizan las nuevas pensiones de jubilación, el indicador es superior, situándose en 75,3%. Sin embargo, una tendencia reciente que se está observando desde la entrada en vigor en marzo de 2021 del nuevo complemento para la reducción de la brecha de género es que el indicador para las nuevas pensiones de jubilación está disminuyendo, desde el 82,9% en febrero de 2021 al 75,3% en junio de 2022, ampliándose la brecha de género marginal. Todo parece indicar que el nuevo complemento por brecha de género (de cuantía fija por hijo) es, en media, menos favorable para las mujeres que el antiguo complemento por maternidad (un porcentaje sobre la pensión) y, además, también lo pueden cobrar los hombres bajo ciertas condiciones.

Ingresos contributivos

Por último, los indicadores contables de ingresos, gastos y saldo en la parte contributiva reflejan la consolidación de la recuperación tras la crisis de la Covid-19. Los ingresos por cotizaciones han mostrado tasas anuales de crecimiento muy positivas (11,9%), un dato bueno que, además, ya no está tan condicionado por la superación de la crisis de la Covid-2019 como el 25,3% del año anterior. Los ingresos contributivos han crecido incluso más que el PIB, situándose la ratio en el 10,9%, un nivel que ronda el máximo histórico, teniendo en cuenta que es un indicador bastante estable a lo largo del tiempo.

Gastos contributivos

El dato de incremento de gastos en pensiones contributivas (6,8%) es claramente superior al del año anterior (3,6%) por el efecto revalorización de las pensiones, responsable de 4,1 puntos de incremento. Los gastos contributivos sobre el PIB, no obstante, han bajado del 13,3% en junio de 2021 al 12,9% del PIB un año después, debido a la recuperación del PIB, aunque a largo plazo la tendencia es creciente (10,5% en diciembre de 2012).

Déficit

Como consecuencia de los datos de ingresos y gastos contributivos, el déficit contributivo anual se ha situado en junio de 2022 en 25.625 millones de euros, equivalente a un 2,03% del PIB. Es un déficit anual menos abultado que el del año anterior (2,54%). El déficit por pensionista también ha bajado en 467 euros respecto al año anterior y se sitúa en 2.855 euros, pero sigue siendo muy superior al existente en diciembre de 2012 (296 euros). Por su parte, el déficit por cotizante está en 1.294 euros, 261 euros mejor que un año antes.

La mejoría en las cuentas del Sistema de Seguridad Social ha continuado en este trimestre, pero no se ha llegado todavía al nivel previo a la pandemia (déficit contributivo del 1,59% en diciembre de 2019). Es probable que la mejoría continúe en lo que queda de 2022, pero la alta inflación es una importante fuente de incertidumbre sobre las cuentas de 2023. Por una parte, los gastos contributivos se verán tensionados al alza con la revalorización de las pensiones en línea con el IPC medio (en el entorno del 8,5%) y, por otro, el aumento de ingresos por cotizaciones sociales será previsiblemente menor en un contexto de contención salarial y un posible pacto de rentas que se está debatiendo.

Descárgate el informe completo del Pensiómetro, barómetro elaborado en colaboración con el Grupo de Investigación en Pensiones y Protección Social, que está formado por profesores de la Universidad de Extremadura (Inmaculada Domínguez y Borja Encimas), la Universidad Rey Juan Carlos (Miguel Ángel García) y la Universidad de Valencia (Mar Devesa, Robert Meneu y Enrique Devesa).

ISL News

Suscríbete a nuestra newsletter

Sé el primero en descubrir todas las novedades sobre jubilación, pensiones, educación financiera y cuarta edad.

Newsletter
Te ayudamos a resolver tus dudas

¿En qué podemos ayudarte?

Algunos temas que te pueden interesar