Es posible compatibilizar jubilación con trabajo a través de la jubilación flexible, una modalidad por la que se puede trabajar en jornada parcial llegado el momento del retiro laboral. Te explicamos todos los requisitos para acceder a ella y su impacto en la pensión.
Llegada la hora de jubilarse y tener más tiempo para disfrutar de familia y ocio, son muchos los ciudadanos que se plantean compatibilizar la jubilación con el trabajo. ¿Es posible? Sí. Existen varias fórmulas para poder compaginar tiempo libre e incrementar ingresos. La jubilación flexible, es una de las modalidades que te permite disfrutar de ambas opciones.
¿Qué es la jubilación flexible?
La jubilación flexible es una modalidad que permite a los pensionistas realizar un trabajo remunerado a tiempo parcial. Este tipo de jubilación se caracteriza por ser compatible el cobro de la pensión por jubilación con un salario.
Requisitos para acceder a la jubilación flexible
- Tener causada la pensión de jubilación. Es decir, que el beneficiario ya haya accedido a la jubilación y esté recibiendo su correspondiente pensión de la Seguridad Social.
- Comunicar a la Seguridad Social la intención de comenzar un trabajo a jornada parcial estando jubilado.
- No pertenecer a los Regímenes Especiales de los Funcionarios Civiles del Estado, de las Fuerzas Armadas o del personal al servicio de la Administración de Justicia.
- Haber cumplido al menos 62 años y cuatro meses de edad si se han cotizado 33 años; 61 años y ocho meses, si tenemos cotizados 34 años y nueve meses o más. La excepción reside en los mutualistas, que pueden jubilarse bajo la modalidad flexible desde los 60 años.
- La nueva actividad laboral debe desarrollarse en régimen de jornada parcial. La normativa estipula que el límite de reducción de jornada se sitúa entre un mínimo del 25% y un máximo del 50%.
¿Cómo afecta a la pensión?
El mecanismo, una vez que la Seguridad Social comprueba que el solicitante de la jubilación flexible cumple todos los requerimientos, es bastante sencillo. El importe de la pensión de jubilación se reduce de forma proporcional a la jornada laboral que desarrolla el jubilado. Por ejemplo, si el beneficiario trabaja media jornada, su pensión de jubilación se reducirá un 50%.
Las cotizaciones efectuadas durante el tiempo que se compatibiliza la jubilación en su modalidad flexible con el desarrollo de una actividad laboral a tiempo parcial tienen importantes efectos en la evolución del importe de la pensión de jubilación. Todo lo que cotice el pensionista en jornada reducida, servirá para recalcular la prestación cuando deje definitivamente la actividad laboral.
Jubilación para autónomos
Los autónomos no pueden acceder a la jubilación flexible, como tampoco los empleados del sector público. Como alternativa, si eres trabajador por cuenta propia y se acerca tu edad de jubilación, puedes plantearte, la jubilación activa.
Diferencia entre jubilación flexible, jubilación parcial y jubilación activa
La jubilación flexible se lleva a cabo una vez que el trabajador hace efectiva su jubilación, mientras que la jubilación parcial se produce antes, a los 60 años. La primera está pensada para quienes deseen prolongar su vida laboral una vez que hayan accedido a la jubilación; la segunda, para quienes deseen retrasar el retiro laboral.
Existe otra modalidad, la jubilación activa que es aquella en la que se permite cobrar el 50% de la pensión y continuar trabajando sin límite alguno. A esta modalidad pueden acceder tanto trabajadores por cuenta ajena como propia, pero los funcionarios tienen limitado el acceso. Una vez que se cesa completamente la actividad laboral, el pensionista vuelve a percibir el total de su prestación.