El Foro de Expertos señala que los PGE adolecen de “falta de transparencia”, lo que no contribuye a mejorar la certidumbre sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones ni a clarificar la situación real del déficit.
Índice
Aspectos clave en pensiones en los PGE de 2022
- El gasto previsto de la Seguridad Social en pensiones para el 2022 es la mayor partida de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), que asciende a 170.494 millones de euros, lo que supone más del 37% del gasto consolidado de los PGE, con un incremento del 4,8% sobre el gasto aprobado en para este año.
- El grueso de esta partida se destina a financiar las pensiones contributivas, con un coste previsto de 149.996 millones, mientras que las pensiones de clases pasivas suponen un gasto de 17.911 millones y las no contributivas se llevan 2.587 millones.
- El Gobierno prevé que los ingresos por cotizaciones del sistema crezcan un 9% en relación con el año pasado debido fundamentalmente a las “optimistas” previsiones económicas, que incluyen tasas esperadas de crecimiento del 7% para el PIB y una elevación de las bases máximas de cotización del 1,7%.
- En cuanto al gasto en pensiones contributivas, se prevé un crecimiento del 4,9% sobre el presupuesto del 2021, estimado en función del incremento del número de pensionistas, de la variación de la pensión media y de una revalorización que este año se realizará con el IPC, que ha sustituido al Índice de Revalorización de las Pensiones (IRP).
- Las pensiones no contributivas experimentarán una subida del 3%.
- Para garantizar el cumplimiento de las obligaciones de la Seguridad Social, los ingresos por cotizaciones se complementarán con transferencias del Estado por un importe de 36.276 millones de euros, un 16,4% más que en 2021, de acuerdo con las recomendaciones del Pacto de Toledo sobre la clarificación y separación de las fuentes de financiación entre el Estado y la Seguridad Social.
- Se plantea una nueva rebaja de la deducción máxima por aportaciones a vehículos previsionales individuales hasta los 1.500 euros anuales y una mejora de la correspondiente a los planes de empleo, elevándola hasta los 8.500 euros.
“Falta de transparencia”
Ante esta fotografía, el último informe del Foro de Expertos considera que el Ministerio debería hacer un “mayor esfuerzo en explicar las cuentas con claridad”, al no aparecer desglosados los ingresos de una forma accesible y la falta de detalle en los gastos propios del sistema que se incluyen en el concepto de trasferencias del Estado, “que resulta insuficiente en los presupuestos para sustanciar el cumplimiento de la separación de fuentes”.
Por otra parte, y aunque una de las recomendaciones del Pacto de Toledo en 2020 era clarificar el principio de separación de fuentes entre el Estado y la Seguridad Social, “en la práctica ocurre lo contrario”, advierte el Foro.
Así, además de los complementos de pensiones mínimas (7.075 millones) y pensiones no contributivas (2.772 millones), se traspasan al Estado algunos gastos impropios, como reducciones en la cotización o prestaciones contributivas al nacimiento y cuidado de menores, por un total de 4.570 millones, pero también se trasladan otros gastos del sistema por conceptos no detallados, con lo que no se aclara su naturaleza de gastos impropios, cuya suma se acerca a los 14.000 millones de euros.
“Esta falta de transparencia no contribuye a mejorar la certidumbre sobre la sostenibilidad ni clarificar la situación real del déficit”, señala el informe del Foro de Expertos.
Riesgo de incumplimiento
Previsiones económicas
Según los miembros del Foro, la “incertidumbre existente sobre las proyecciones macroeconómicas” utilizadas en la elaboración de los PGE “sugiere que existe un riesgo significativo de incumplimiento de las previsiones de ingresos por cotizaciones, que suponen un fuerte crecimiento del empleo y la producción”.
En esta línea, resultan “preocupantes” las recientes previsiones de la Comisión Europea, que reducen el crecimiento esperado del PIB en 2021 a un 4,6% y a un 5,5% en 2022.
Elevada inflación
En cuanto al alza de los precios, que en noviembre situaron la inflación en el 5,6%, según el Índice de Precios al Consumo (IPC) va a ser “claramente más desfavorable” que la contemplada en la elaboración de los presupuestos, “lo que supondrá un mayor incremento del gasto en prestaciones, especialmente pensiones”.
“Las medidas adoptadas en 2021 de sustitución del Índice de Revalorización de las Pensiones por el IPC implican un mayor gasto estructural del sistema. Si esta revalorización no viene acompañada de un incremento de los ingresos o de una disminución del gasto por otras vías, puede poner en peligro la sostenibilidad del sistema a largo plazo”, advierte el Foro de Expertos, que mantiene su defensa del sistema de revalorización de las pensiones previsto en la reforma de 2013, que sirve para hacer explícita la restricción presupuestaria del sistema de una forma transparente, que facilita la búsqueda de soluciones por la vía de aumentar los ingresos o reducir los gastos.
Descárgate completo el último informe del Foro de Expertos, órgano integrado por Guillermo de la Dehesa, José Ignacio Conde-Ruiz, Rafael Doménech, Ángel de la Fuente, José Antonio Herce y Mercedes Valcárcel reconocidos profesionales de primer nivel en el ámbito de la economía y las pensiones tanto a nivel público como privado. Puedes ver todos sus informes en nuestra web.
Está claro que se trata de una nueva «patada a seguir» como se denomina en el argot del rugby. No es posible fiar la cobertura del abultado déficit anual del con cargo a deuda pñública de modo permanente. Por otra parte, confiar en un repunte del PIB superior a la inflación+incremento natural del montante total de las pensiones es, a todas luces, un brindis al sol.
En este escenario, lo que debería hacer el gobierno de turno es decir la verdad a los ciudadanos (aunque está claro que los ciudadanos, en su mayoría, castigarían en las urnas a quien les dijera la verdad). Por tanto, mi propuesta pasa por:
*Comenzar con la necesaria educación financiera en el ámbito escolar y de forma generalizada.
*Fomentar la existencia de foros públicos de opinión, no politizados, que sensibilicen al gran público sobre las verdaderas dimensiones del problema.
* A partir de ahí, decir la verdad y proponer soluciones que conjuguen:
A) Una adecuada correlación entre aportaciones y prestaciones.
B) Que estas prestaciones se ajusten a un modelo de neutralidad actuarial (con independencia del mantenimiento de los complementos amínimos que se establezcan, fianciados via impuestos)
C) Introducir el concepto de «Accionista» para los pensionistas, de tal modo que las crisis se soporten de modo proporcional no solo por los activos. En definitiva, adaptar el montante a percibir o la revalorización a la marcha de la economía (de la que se nutren las pensiones)
d) Establecer un sistema fiable, neutro y consistente de información sobre futuros derechos, que permita a cualquier trabajador tomar las decisiones de ahorro mas adecuadas, en función de sus perspectivas de cobro en la jubilación.
e) Fomentar el ahorro previsional y reinvertir esta masa monetaria en nuestra economía.
Saludos